Relaciones sexuales dirigidas
Reproducción Asistida:
Relaciones sexuales dirigidas: Una opción para parejas que buscan concebir
Las relaciones sexuales dirigidas, también conocidas como coito programado, es una técnica de reproducción asistida de baja complejidad que busca aumentar las posibilidades de embarazo natural en parejas heterosexuales. Esta técnica se basa en identificar el momento más fértil del ciclo menstrual de la mujer y programar las relaciones sexuales para que coincidan con la ovulación.
¿Cómo funciona?
- Monitoreo del ciclo menstrual: La mujer debe realizar un seguimiento de su ciclo menstrual, ya sea mediante la medición de la temperatura basal corporal, la observación del moco cervical o la realización de pruebas de ovulación.
- Determinación del momento fértil: mediante exploración ginecológica, ecografías transvaginales seriadas para valorar desarrollo endometrial y crecimiento folicular y test de ovulación que realiza la paciente se determina el momento con mayor probabilidad de embarazo en el ciclo si tenemos relaciones dirigidas.
- Relaciones sexuales programadas: Se recomienda mantener relaciones sexuales sin protección durante los dos días previos a la ovulación, el día en que se espera que ocurra y los posteriores si es posible. La ovulación se puede desencadenar aplicando medicación para marcar el momento óptimo de relaciones cuando se visualice un endometrio y folículo dominante de tamaño adecuado.
¿Para quiénes están indicadas?
Las relaciones sexuales dirigidas pueden ser una opción adecuada para:
- Parejas con esterilidad de causa leve o sin causa aparente.
- Mujeres con ciclos menstruales regulares.
- Parejas que desean evitar procedimientos más invasivos o costosos de reproducción asistida.
Ventajas:
- Sencilla y accesible: Es un método fácil de realizar y que no requiere tecnología compleja ni demasiada medicación , a veces ninguna.
- Bajo costo: En comparación con otras técnicas de reproducción asistida, las relaciones sexuales dirigidas son una opción más económica.
- No invasiva: No implica procedimientos médicos ni quirúrgicos.
Desventajas:
- Tasas de éxito moderadas: Las probabilidades de embarazo con relaciones sexuales dirigidas son menores que con otras técnicas de reproducción asistida.
- Requiere seguimiento y compromiso: La mujer debe comprometerse con el monitoreo de su ciclo menstrual y la pareja debe programar las relaciones sexuales según lo indicado.
- No es adecuada para todos los casos: No es una opción para mujeres con ciclos menstruales irregulares, problemas de ovulación o trompas de Falopio obstruidas.
¿En qué se diferencian de la inseminación artificial?
La principal diferencia entre las relaciones sexuales dirigidas y la inseminación artificial radica en la forma en que se depositan los espermatozoides en el aparato reproductor femenino. En las relaciones sexuales dirigidas, los espermatozoides llegan al óvulo de forma natural tras el coito programado, mientras que en la inseminación artificial, los espermatozoides se lavan, se procesan (capacitan) y se introducen en el útero mediante un catéter muy fino.
Recomendaciones:
- Es importante consultar con un especialista en reproducción asistida para determinar si las relaciones sexuales dirigidas son una opción adecuada para la pareja.
- El especialista puede guiar a la mujer en el monitoreo de su ciclo menstrual y proporcionar las instrucciones necesarias para programar las relaciones sexuales.
- Es fundamental mantener una comunicación abierta y honesta con la pareja durante todo el proceso.